Afinar a 442, sutilezas y anécdotas

En los últimos años parece haberse puesto de moda el piano afinado a 442. En mi opinión, a no ser que haya una razón de peso, como la de tener el piano que tocar en conjunción con instrumentos de viento, afinar un piano a 442 no está ni justificado ni tampoco le beneficia.

Los pianos están diseñados para afinarse a su tonalidad estándar de 440 htz. Cambiar un piano de 440 a 442 en muchas casos desestabiliza el piano. Por otro lado, hay pianos que debido a su edad y/o estado, no aceptan la subida de tono a 442, ya que inevitablemente se vienen abajo. Con frecuencia pasar un piano de 440 a 442, si se quiere hacer bien, implica mas de una afinación.

Pero como siempre hemos dicho, el afinador lo único que puede hacer es asesorar y dar su opinión, la última palabra la tiene el cliente. Y si el cliente (que al fin y al cabo es el dueño del piano) aún en contra de nuestro criterio quiere que su piano se afine a 442, pues así sea. No seré yo quien discuta las instrucciones de mi pagador!

Para saber si un piano está afinado a 440 (por ejemplo) podríamos tomar un afinador cromático y comprobar si el La4 coincide con esta medida?. En absoluto, la medida muy raramente sería de 440 htz exactos, pues casi con toda seguridad la lectura nos daría algunas décimas normalmente arriba o abajo, y sin embargo la afinación podría muy bien estar justo a 440.

Como es esto? Cuando hablamos de 440 o de 442 (pongamos por caso) nos referimos al conjunto de todas las notas del piano y no a una sola, y si queremos saber lo alto o bajo que está el piano tendríamos que hacer varias medidas en toda la extensión del teclado y hacer un cómputo general. Técnicamente hablando, si afinamos un piano a 442 estaríamos afinando un 8% de un semitono mas alto de la afinación estándar a 440.

Cuando queremos afinar un piano a 442, lo primero que necesitamos es la referencia La4 442 (un afinador cromático nos puede ayudar,  pues no hay diapasones La442) pero luego una vez que hayamos construido el temperamento ese La 442 muy probablemente se alterará, y al final casi con toda seguridad see habrá movido algunas décimas, prácticamente nunca clavado en 442. Ver “Afinar un piano a 442” en el Capítulo VI del libro Como afinar un piano.

Para ilustrar lo dicho os relato una anécdota que me ocurrió en una ocasión que fui a afinar un piano para el concierto que iba a dar un joven pianista que hace fusión jazz-flamenco (no doy nombres). El evento tenía lugar en una localidad de la costa malagueña con ocasión de unos actos culturales. Me dejaron el encargado de que el piano se afinara a 442, y yo obedientemente a 442 lo afiné. Hasta ahí todo bien, solo que cuando vino el pianista para hacer la prueba de sonido, se sacó del bolsillo un pequeño afinador cromático que llevaba para comprobar si el piano de verdad se había afinado a 442. Por supuesto la lectura en La4 no era 442 (por las razones que he explicado) Me mando a llamar para pedirme explicaciones, ya que en su afinador cromático el La4 no le daba exactamente 442, si no 442,5 creo, o algo así.

Aunque mi paciencia es grande y soy de natural tranquilo y pacífico, estuve a punto de responderle con una  grosería, pero nó, me controlé, respiré hondo y le expliqué como buenamente me permitieron mis escasas dotes diplomáticas que aquello era normal y que el piano aunque el La4 leyera 442,5 en realidad estaba afinado a 442. Por la expresión de su cara no creo que lo convenciera, tampoco es que me importara mucho, la verdad. Ah, que bien iría todo si cada una se dedicara  a sus cosas y dejara trabajar a los demás!  Zapatero a tus zapatos, reza el sabio refrán castellano.

Por cierto una constatación, son precisamente los pianistas realmente buenos, los verdaderos grandes, los que menos problemas nos dan a los afinadores. Sencillos y modestos  en su inmensa mayoría, su talento brilla por sí mismo.

© copyright Juan Olalla 2012  Todos los derechos reservados
  
Tienes algún comentario que hacer, alguna duda o pregunta?  Tu opinión es altamente valorada, por favor deja tus comentarios y/o sugerencias. Gracias